Silencio de campaña

Se cierran las persianas, las puertas, las ventanas. 100 días de ajetreo en los medios, operaciones, equívocos, verdades, mentiras y secretos. El barómetro mediático desciende y surge lo que había: cenizas.

Poco contenido y pobre. Poquitisimo bueno. Hoy tenemos la posibilidad de un pantallazo, un escuchazo de la actualidad mediática. En el fragor de la campaña nos perdimos algunas cotidianeidades.

Las mañanas mediodía todos cocinando: ¿qué pasa con este auge de llenar el televisor de humo? Son como oleadas luego atragantándonos con las noticias. La aparición de Zulma Lobato, un travesti bastante ajetreado (se llama Zulma por Faiad y Lobato por Nelida), dio vuelta por todos los canales hasta que la pobre tronara del todo.

Algo bastante común en la televisión argentina pero también en la del mundo, sino revisá el articulo del diario La Nación del dia domingo en donde los psicólogos están asombrados de la necesidad de fama que reina. ¿Será una nota del ‘92? Porque ya no pueden tener asombros, ahora tienen que tener respuestas.

“Debemos detenernos y pensar en la importancia que se le da en la cultura actual al hecho de ser famoso”, afirma una psicoanalista. A veces creo entender por qué mejor no leer los diarios. ¿Cómo puede haber este tipo d e notas? ¿Como se publica una nota arcaica y obvia en un diario Nacional? A ver, ser reconocido y querido siempre fueron deseos de la mayoría d e los seres humanos, hoy que te reconozcan es como un acto mágico (una felatio por Internet, un paso por un reality, una denuncia en intrusos), es una instantánea. El problema que aquellos que hoy parecen tener como opción ser famosos sin mas, es que la gente no te conoce, o si muy poco, pero no recuerda tu nombre. Casi nadie conoce a nadie.

En Telefe esta el programa mas tonto pero exitoso del año “justo a tiempo” en donde juegan a la visita. Si, a la visita, el nombre es de una ingenuidad que hace pensar que tenemos maestras de la salita azul imprimiendo la pantalla ( y , seguro que las maestras lo harían mejor). El tema es que , con los ojos cerrados , tener que adivinar quien es la visita. Pero, obviando la idea pava, “la visita”, si no es Mirta o Gasalla ,no tiene nombre para el común de la gente.

A mi me da como vergüenza ajena, eso de estar ahí y que el que representa al publico siempre este “no me acuerdo el nombre”… Si no sabían el nombre de Badia (no esta mal ¿por que lo vas a saber?), ¿cómo van a saber el de Monica Ayos o el de Evangelina Anderson…?

Antes elegías algo, tenias una vocación y tu sueño era triunfar y que te quieran por hacer eso lo mejor que se puede. Hoy el sueño es triunfar aunque sea como asesino serial. Pero esto no es que se le ocurrió a la gente..no , esto comenzó a pasar en los medios a partir de la espantosa idea del fin de la historia y, la caída de las ideologías.

¿Qué? ¿Te parece que me fui al carajo? Pensalo un minuto…
1989: caída del Muro, desde allí todo va hacia la inmediatez, no hay otro diferente, no hay alteridad. El otro diferente es todo , cualquiera, el que decidamos (en realidad deciden ¿no?)

Los canales que lideran no producen nada nuevo ,los que le siguen reproducen lo no nuevo de los otros y así sucesivamente , hasta, no sabemos como Zulma Lobato esta en le prime time en cadena. Y, los pocos programas culturales del aire como del cable, ahora han tenido la idea de poner a conducir gente “famosa”, pero para que ,por que , si primero no saben del tema y segundo , son poco famosos e insisto la gente no sabe quienes son. ”Esa actriz, rubia, la que dejo d e actuar, la que esta casada con el que estaba con Adrian Suar en ese programa…que eran una banda, en donde tambien estaba…” BASTA!!!!

Perdon pero me pone loca!

Toda la semana los programas periodísticos hablaban de lo pobre de la campaña. Es verdad. ¿Y por casa como andamos? Como diria mi tia…
Pobres de ideas, de propuestas, de escucha y el circulo comienza a cerrarse. Uno se pregunta como comenzó y la verdad no sabe. Uno se pregunta cómo frenarlo y también se hace difícil. La indigencia de la novedad llega a cifras alarmantes.

Esta semana, como nos tienen acostumbrados en los últimos 15 dias , se murió michael Jackson. (entre otros) Un personaje con muchas contradicciones, el tipo que vendió más discos en la historia del mundo. Con costumbres bastante patológicas, un musico que uno (yo por lo menos ) puede haber bailado pero que no conmueve (un poco bizarro para conmover, yo diría tenes que tener un lado bizarro para que te conmueva. Como los fans que siempre sean de quien sean son bizarros. Como medio borderline…) Bueno, como decia, se murio Michel Jakson. Y el jueves, en el noticiero del trece, el conductor nos decia ”Aquí una foto no para personas sensibles, pero esta publicada, es la ultima foto de MJ” Y aparece una imagen de un sujeto asistido con un respirador, tomada seguramente por un celular de alguien del servicio de emergencia que lo asistió en sus últimos minutos. Hay gente que no puede resistirse a tomar una imagen asi. Ahora un noticiero, ¿tiene que caer alli?

Unos medios perdidos en su rol, desinformados (aunque parezca ridiculo), sobredimensionados como un participante de GH. “Como estoy aquí entonces, como soy parte d e la radio, la tele, los diarios. Tengo derecho a pedir que se me preste atención, que me sigan, me hagan caso, y que me crean”. No, no te conozco, de verdad no puedo tener afinidad por el solo hecho de que parezcas un éxito. Y, como cerrándose el circulo: ayer escuchaba a la Negra Vernaci (con quien siempre me río), y decía que no iba a votar, porque estaba todo mal, y no le creía a nadie, y todo era tan pobre…)

¿Entonces? ¿Nosotros desde los medios no tenemos que ver con la pauperización general, los otros son los que no se les ocurre nada, los vacios? Creo que esto de poner al otro como responsable de todo, nos convierte en incapacitados para poder pronunciar alguna verdad.

El domingo a votar, a votar a quien nos parece que puede cambiar lo que hay que cambiar, que puede profundizar lo que hay que profundizar, que puede sostener lo que hay que sostener. La vida es una sola: por que no tomarse unas horas para pensar, que , aunque muchos no lo crean ¡es tan lindo!

Sí, ya sé. Mejor me callo, y empezamos.